La producción francesa ‘Perfumes’, dirigida por Grégory Magne, se inserta en el prosaico mundo de juntar a dos personalidades antagónicas, cuyos comportamientos andan marcados por las diferentes posiciones y estatus social que ocupan. Un choque de trenes garantizado que deja paso a todo tipo de situaciones, sirviendo como plataforma a partir de la cuál abordar las más variadas temáticas.
La gestión de las mismas ha alumbrado en tiempos recientes dos joyas: ‘Green Book’, con Viggo Mortensen y Mahershala Ali recorriendo el sur profundo de Estados Unidos (esa América abonada a las peroratas de Donald Trump) e ‘Intocable’, película llena de humanidad a partir del trato entre un lisiado y su asistente. Emmanuelle Devos se mete en el papel de diva. Una mujer con capacidades olfativas extraordinarias que se gana muy bien la vida prestando su privilegiado sentido a las más variadas causas. De difícil trato, va a requerir los servicios de un chófer (Grégory Montel).
Agradable comedia
El personaje de Montel es todo lo contrario. Humilde, inseguro, está en vilo por lograr la custodia compartida de su hija. A punto de ser despedido de la empresa, la explícita petición de la protagonista, que requiere de sus servicios, lo salva del desempleo. Moviéndose en todo momento sobre terrenos seguros, ‘Perfumes’ presenta unos personajes que evolucionan en coherencia a su idiosincrasia. Hacen justamente lo que se espera de ellos. Sin embargo, y pese a cierta previsibilidad, la fórmula funciona. Me divierte el proceso por el que esta gente tan dispar va ganando complicidad.
Porque quizá la soledad y la frustración sean sensaciones universales. Que llegado un momento puede afectar en mayor o menor medida a todo el mundo, independientemente de su condición. El dúo que forman Devos y Montel aporta una sobriedad que casa muy bien con el conjunto de la historia. Y al igual que sucede con las maletas y utensilios que este chófer va trasladando de lugar, siguiendo el arbitrario criterio de su jefa, esta agradable comedia hace lo propio con el ánimo de sus criaturas.
Nuestra valoración