»Lo usual para un escritor es entregar un guion y luego desaparecer. Pero eso no es para mí. Quiero estar involucrado de principio a fin». Esta declaración de intenciones del oscarizado Charlie Kaufman presagiaba su paso tras las cámaras más bien pronto que tarde. El guion de su tercer largometraje como director, ‘Estoy pensando en dejarlo’, se antoja una propuesta tan personal que lleva el sello de lo intransferible.
Y al igual que Christopher Nolan se regocija en la complejidad de sus criaturas, con legión de seguidores estrujándose los sesos en segundos y terceros visionados intentando comprender la chorrada de turno, parece que Kaufman le ha cogido gusto a que la concurrencia quede deslumbrada ante su ágil y brillante prosa. Si el primero anda empeñado en convertir el cine en un fractal, el segundo, en esta producción original de Netflix, traza un retrato surrealista del amor, la existencia y el paso del tiempo.
Otra película que se regodea en su complejidad
‘Estoy pensando en dejarlo’ comienza con una pareja de novios (Jessie Buckley y Jesse Plemons) circulando bajo una intensa tormenta de nieve. Llevan escasas semanas juntos y van a conocer a los padres de él (Toni Collette, David Thewlis). De ese diálogo aflora la indecisión de ella acerca del futuro de la relación. Bajo un ambiente deliberadamente plomizo, el personaje al que da vida Buckley se desliza sobre una suerte de disertación de índole cartesiana acerca de la duda y la existencia.
Durante buena parte de su larguísimo metraje la película desborda por la vocación verborreica de sus protagonistas. Un ida y vuelta de ideas y reflexiones que Kaufman acaba por canalizar hacia un lado oscuro, asfixiante. La ausencia de ritmo penaliza una propuesta que en su desenlace se torna inclasificable. Un delirio que deja el campo abierto a variopintas interpretaciones. Habrá quiénes (no dudo que serán multitud) inviten a nuevas revisiones para exprimir todo el bagaje escondido. No es mi caso. Si el cine se mueve por estos raíles, un servidor se baja del tren.
Nuestra valoración
Hombre, ya podrías tú ser mas económico y decirnos: “basta que el cine invite minimamente a pensar que ya no me interesa”, y te hubiera dejado de leer antes…
Al contrário de ti, sí que recomiendo a la gente que la vea. Y sí, no sólo una vez, sino incluso más de dos o tres.
A mí también me gusta el cine que suscita el pensamiento. Otra cosa es que estemos de acuerdo en qué registros y sobre qué temáticas se nos invita a razonar. Es ahí dónde enmarco mi crítica y digo, sin hacer spoiler, por qué no me gustan este tipo de propuestas. Y el cine como la vida también es discrepancia, por lo que me alegro que a ti si te haya gustado.
Gracias por comentar.
Un saludo