Triste noticia para el mundo de la música. Keith Flint, vocalista de la famosa banda de música electrónica The Prodigy, se ha suicidado, según han confirmado sus compañeros por redes sociales.
“Con profunda conmoción y tristeza podemos confirmar la muerte de nuestro hermano y amigo, Keith Flint. Un pionero auténtico, un innovador y una leyenda. Le echaremos siempre de menos”, han lamentado sus compañeros en un comunicado oficial.
La noticia sobre dicho suicidio ha sido confirmada por el compositor, teclado y líder de la banda, Liam Howlett, quien ha dicho en Instagram: “Las noticias son ciertas. No me puedo creer que esté diciendo esto, pero nuestro hermano Keith se quitó la vida este fin de semana. Estoy conmocionado, jodidamente rabioso, confuso y con el corazón destrozado…descansa en paz, hermano. Liam”.
Asimismo, la policía ha indicado que «nos ha llamado una señora preocupada por el estado de un hombre en una dirección en Brook Hill justo después de las 8.10. La muerte no está siendo tratada como sospechosa y se está preparando un expediente para las autoridades forenses. Sus familiares ya han sido informados».
Desgraciadamente, la estrella de 49 nos deja. Un icono de la música electrónica, así como de otros géneros como el rock o el hip hop. Jamás olvidaremos sus piercings, tatuajes, extraños peinados, pelo verde y, sobre todo, su cara enloquecida.
Talento, drogas y alcohol
Entró en el grupo como bailarín en un primer momento y consumió excesivas drogas durante toda su trayectoria, como según afirmó, «me metía cocaína, marihuana, y alcohol en enormes cantidades.También drogas sintéticas».
“A veces hacía filas de pastillas y me las iba metiendo una a una hasta que me quedaba inconsciente. Eso me convirtió en una persona introspectiva, aburrida y superficial», añadió para una entrevista.
Tras problemas de adicción, tuvo que someterse a un tratamiento de desintoxicación y decidió mudarse a las campiñas de Essex para huir de las malas compañías y tener controladas sus adicciones.
Tras alguna recaída, logró controlarse y publicar el segundo álbum (12 años después del primero) de The Prodigy. Después, invirtió en caballos de caza y regentó un pequeño pub local.
En 2015 volvió al estudio y grabó el tercer disco de la banda. En 2018 ha estado estado de gira por todo el planeta sin caer en los excesos, aparentemente.
Os dejamos uno de sus míticos temas: Firestarter